Según el refrán popular de que el mundo da muchas vueltas y no sabe qué le depara a cada uno de los habitantes, para el ex pelotero Oreste Marrero el destino lo llevó a realizar algo que siempre ha sido su mayor amor, el béisbol.
Oreste Vilato Marrero Vázquez natural de Bayamón, criado en los predios del barrio Hato Tejas firmó profesional con los Cerveceros de Milwaukee en el 1986, jugando en las ligas menores por espacio de 12 años. Debutó en las Grandes Ligas en el 1996 con el equipo de los Expos de Montreal, militó de igual manera, con los Dodgers de Los Ángeles. También participó por par de temporadas en la Liga Mexicana, a parte de su participación en el torneo de béisbol profesional de Puerto Rico vistiendo el uniforme de los Senadores de San Juan y los Lobos de Arecibo.
Luego de su retiro del béisbol organizado Oreste quien hoy en día cuenta con 50 años y físicamente se ve como un roble, se fue a trabajar a la empresa privada por cerca de 15 años, luego pasó a trabajar a nivel estatal con el estado de New York con la oficina de trabajar con la población de indigentes.
Sin embargo, nunca ha podido desvincularse del béisbol donde se mantiene activo con un sin número de equipos de béisbol entre las edades de 8 años hasta colegiales en el área de Long Island y Brooklyn. También se desempeña como entrenador personal de peloteros.
De igual manera, se mantiene activo con la asociación de ex peloteros de Grandes Ligas en la parte este de los Estados Unidos, cuya labor es ofrecer clínicas a través de esos estados con un grupo de ex jugadores de béisbol profesional.
También le satisface el trabajo que viene realizando bajo el auspicio de las Grandes Ligas, el llevar esas clínicas a Latinoamérica, en su caso específico a Nicaragua, trabajo que ha realizado los últimos siete años consecutivos, junto a un grupo de ex peloteros profesionales.
Su experiencia en esa comunidad rural lejos de las grandes ciudades ha sido fructífera, al punto que ha desarrollado una relación estrecha con esa comunidad que cada año esperan esa visita de los ex peloteros. Señala Marrero Vázquez que cada año van cargado con suministros educativos, deportivos y por supuesto las tan esperadas clínicas de béisbol. Resalto que como parte de la visita se les ofrecen adicionales orientaciones de prevención sobre el maltrato y sobre enfermedades comunes en comunidades donde el trato de la salud en pobre.
Sobre esta experiencia en este país que tanto admira a la leyenda que fue Roberto Clemente, el ex inicialista bayamonés se expresó como una sumamente gratificante y llena de satisfacciones que espera continuar mientras sea factible.
Oreste estuvo en la isla de paso, pues su padre el deportista Israel Marrero cumplía 75 años y sus hijos Oreste, Vilato y Mayra junto a familiares le celebraron su cumpleaños en su residencia en Hato Tejas donde se reunieron familiares y amigos de Marrero en dicho festejo.
Fuente: El Todo / 28 de noviembre al 4 de diciembre de 2019