Ron del Barrilito Vende Barrica de 37 años de Añejamiento por $400,000

Un barril de 37 años de añejamiento de Ron del Barrilito en Bayamón fue vendido recientemente por casi $400,000, como parte de un nuevo programa de la marca puertorriqueña en el que los amantes de este espíritu destilado pueden comprar el barril de su preferencia y llevar el líquido en botellas personalizadas.

El nuevo ofrecimiento arrancó hace un año y, desde entonces, han vendido múltiples barriles, cuyo costo sobrepasó los $100,000, precisó Joaquín Bacardí, presidente ejecutivo de Hacienda Santa Ana LLC, la empresa que en 2017 adquirió los activos de la compañía Edmundo B. Fernández, que produjo Ron del Barrilito desde 1880 en Bayamón.

El costo de los barrilles, aseguró el empresario, depende del tiempo de añejamiento. Sin embargo, mientras más joven sea el barril, más alto pudiera ser el número de botellas. En el caso del barril de 37 años, el total de botellas ascendió a 162.

Ron del Barrilito Vende Barrica de 37 años de Añejamiento por $400,000

“Vendemos el barril, lo embotellamos con su nombre (del consumidor) en la etiqueta y se lo llevan”, sostuvo el empresario. “Nadie en el Caribe, que yo conozca, está vendiendo barriles de ron en ese precio ($400,000). Eso es un reflejo de que la gente confía en que el producto dentro del barril es cien por ciento auténtico, no ha sido adulterado y que es puro”.

Bacardí explicó que una vez el cliente escoge el barril de su preferencia, la entrega de las botellas se produce entre tres y cuatro semanas. Aseguró que la identidad de los clientes se mantiene bajo confidencialidad y que el producto lo reciben en un empaque de calidad.

“Lo que queremos es que el ron llegue al nivel de respeto de los escoceses (whisky), el coñac y los bourbons. Todo el mundo reconoce la calidad de estas bebidas, pero al ron no se le ha dado el mismo respeto”, sostuvo sobre la intención del programa, al tiempo que aseveró que en la isla existe mercado para este tipo de ofrecimientos.

La autenticidad de los barriles

Para Luis Planas, el Maestro Ronero de Hacienda Santa Ana, lo que hace único a Ron del Barrilito son las barricas de roble americado que fueron utilizados previamente para almanecar jerez oloroso en España. A las barricas se suma el macerado, que son frutas deshidratadas puestas en contacto con alcohol por un periodo de seis meses para extraer su aroma y sabor.

“Cuando vas uniendo todo, vas teniendo el aroma y el sabor, que no es azúcar añadida, sino azúcar de extracción hecha del alcohol hacia la fruta deshidratada en un momento dado”, explicó. “Nosotros también usamos agua pura de lluvia, que se filtra con carbón y arena, para luego pasar al barril y hacer el sinergismo final”.

Planas sostuvo que esta técnica es propia de Ron del Barrilito y muy parecida a la que se usa en Francia para el coñac, por lo que aseveró que el producto no tiene comparación. Planas trabajó por 30 años en Destilería Bacardí.

“A veces la gente le dice a este ron que es el coñac del Caribe. Es muy único y un sinergismo que no vas a encontrar en ningún lugar”, añadió.

Vuelven al corcho

Siguiendo la visión de mantener la imagen de Ron del Barrilito como un espíritu destilado clásico y de calidad, Bacardí reveló que decidieron regresar al corcho de las botellas. Desde 1970, las botellas tenían una tapa de plástico, pero para el empresario, no representaba la imagen de la marca.

“Barrilito es un producto artesanal, hecho literalmente a mano sin ningún no natural. Usamos agua de lluvia y nuestros macerados son naturales, no usamos concentrados y tampoco usamos preservativos. El tapón era lo que faltaba, porque el corcho ahora lleva la marca a como se originó “, explicó.

Además de la imagen, el corcho ayuda a la preservación del ron, ya que, subrayó, combate efectivamente la oxidación que con una tapa de plástico avanza con el tiempo. “Mientras más sellado esté el producto, más tiempo dura la botella”, dijo.

Regresar al corcho, indicó, conllevó una inversión -que no precisó- en la línea de producción, así como para la compra de materia prima. Durante el proceso de rediseño, Bacardí destacó que mantuvieron intacta la etiqueta frontal de las botellas, como parte del compromiso que realizó con la familia Fernández al entrar al negocio.

“Queremos que la gente reconozca a Ron del Barrilito por su autenticidad, porque se produce en el mismo local donde nació. No es un producto que empezó en una propiedad y cambió a otra. Barrilito sigue intacto como se originó y eso es bien importante. También queremos que la gente reconozca la labor que se hace, porque hemos preservado todos los pasos e ingredientes. No hemos cambiado absolutamente nada”, recalcó.

Impulso a la exportación

De acuerdo con Bacardí, el consumo de Ron del Barrilito en Puerto Rico aumentó en 400% entre 2020 y 2021, por lo que la marca continuará su estrategia para colocarse como el ron preferido de la mixología boricua.

El crecimiento, aseguró, responde a la preferencia de los consumidores por el ron artesanal, pero específicamente por el ron añejo. De igual forma, los tours que ofrecen en Hacienda Santa Ana, reclamó, han sido fundamental para el incremento, ya que en 2021 recibieron sobre 30,000 visitantes.

“Es una señal de que la gente está curiosa por conocer (la marca) y las ventas que refuerzan que a la gente le gusta lo que están probando”, subrayó.

Para continuar con la tendencia al alza, el empresario apostó a la exportación de los productos a Estados Unidos, donde tienen presencia en 35 estados de la mano de la distribuidora Southern Glazer’s Wine and Spirits, que es la más grande de su tipo en el país. Asimismo, cerraron un acuerdo con la distribuidora italiana para llevar el ron a Europa, específicamente a España, Alemania, Inglaterra e Italia.

Igualmente, la empresa invertirá unos $3 millones en un plazo de cinco años para la construcción de una nueva planta de embotellado y nuevos almacenes, con la intención de responder efectivamente a la demanda. Mientras, realizarán mejoras a los caminos de la hacienda y, posteriormente, embellecerán la propiedad con plantas endémicas de Puerto Rico.

Sobre si esperan lanzar nuevos productos, Bacardí enfatizó que Ron del Barrilito busca mantenerse en la categoría de rones añejados. Actualmente, la marca tiene en el mercado productos de dos, tres, cuatro y cinco estrellas.

“Nunca vas a ver de Barrilito un producto saborizado y blanco. Barrilito siempre va a ser fiel a lo que es el origen: el ron añejado”, acotó.

Tanto Bacardí como Planas se mostraron confiados con el futuro de la industria del ron en Puerto Rico, pero reclamaron mejores condiciones fiscales para las destilerías artesanales.

A inicios de este año, el secretario del Departamento de Desarrollo Económico y Comercio, Manuel Cidre, se mostró a favor de un cambio en los arbitrios a favor de las destilerías pequeñas, de manera que el dinero se utilice en el desarrollo y crecimiento de estrategias para promover a Puerto Rico como un fabricante de ron a gran escala.

“Los impuestos tienen que ser justos basados en tu ‘output’… con los productos pequeños se le puede dar un tratamiento diferente porque todos tenemos el mismo costo. Nadie compra más barato que nadie, pero cuando tienes escala, tienes millones de cajas, el costo se diluye y nosotros no tenemos esa ventaja”, señaló.

Fuente: elnuevodia.com / 29 abril de 2022