Hablar de Bayamón es hablar de deportes.
Este es el pueblo que vio nacer a campeones mundiales de boxeo como Héctor ‘Macho’ Camacho, Wilfredo Vázquez, Wilfredo Vázquez Jr. y al también medallista olímpico Daniel Santos. También ha sido la cuna de desarrollo de baloncestistas en categorías menores como Mario “Quijote” Morales y Eddie Casiano, o jugadores adoptados a nivel superior, como Evelio Droz, Alberto Zamot, Rubén Rodríguez, Rubén Montañez, Mariano ‘Tito’ Ortiz y Jerome Mincy, así como dirigentes cotizados del calibre de Julio Toro.
Además, es la casa de destacados peloteros de las como José Orlando Berríos y Christian Vázquez (que viene de quedar campeón en Grandes Ligas con los Astros de Houston). Y ni hablar de otras modalidades, incluyendo al gimnasta olímpico Tommy Ramos y al voleibolista Hiram ‘Avioneta’ Padilla. Hasta en la lucha libre profesional tienen exponentes de renombre tales como “El Mesías” Ricky Banderas, ‘The Precious One” Gilbert y la pareja de Thunder & Lightning.
Más aún, es un pueblo que sobresale por su compromiso genuino con el desarrollo de atletas del futuro y el disfrute de actividades, pues posee una gran diversidad de instalaciones de primer orden, incluyendo los complejos deportivos Efraín Calcaño Alicea, Rafael Martínez Nadal y Onofre Carballeira, siendo este último el que alberga el estadio Juan Ramón Loubriel, el coliseo Rubén Rodríguez y el gimnasio Miguel Frau.
El estadio Juan Ramón Loubriel, inaugurado en 1974, fue la casa de los Vaqueros en el béisbol en lapsos que, aunque con pausas se extendieron hasta el 2003, ganando campeonatos en 1975, 1976, 1980 y 2002. Desde el 2003 se ha convertido en la ‘Meca del Fútbol’ en Puerto Rico, siendo el hogar de los Islanders de Puerto Rico en la North American Soccer League (NASL) hasta el 2012, donde fueron monarcas en el 2011. Allí actualmente milita el Bayamón FC y ha sido escenario de clasificatorios mundialistas, así como el cotizado partido de exhibición en 2012 entre la selección de España (entonces campeona del mundo) y Puerto Rico.
Esto sin contar con peleas de boxeo de renombre, como el clásico entre Alfredo ‘Salsero’ Escalera y el nicaragüense Alexis Argüello en 1978, o los seis aniversarios corridos de lucha libre entre 1988 a 1994.
“Lo que muchos desconocen es el origen del nombre del estadio Juan Ramón Loubriel. Él fue destacado educador y entrenador que falleció trágicamente en un vuelo que se estrelló en el mar en 1970 cuando venía desde un fogueo con el equipo nacional femenino de voleibol desde República Dominicana. Solo sobrevivió una jugadora, Carmen Rosa Sabater, quien había volado un día antes para asistir a un reconocimiento en Puerto Rico”, relató Peter Rivera, expromotor de boxeo oriundo de Bayamón y actual miembro de la gerencia de los Vaqueros en el baloncesto.
“Su sobrino ‘Moncho’, quien ha sido la ‘mascota’ de los Vaqueros por cuatro décadas y ha sido atleta de las Olimpiadas Especiales, lleva también su nombre”.
En el caso del coliseo Rubén Rodríguez, ahora apodado “El Rancho”, este recinto ha sido anfitrión de las Vaqueras en el voleibol femenino, ha sido el escenario para el único evento de UFC en la Isla (en 1996) y también de grandes carteleras boxísticas, incluyendo el primer evento pague-por-ver de pugilismo en la historia boricua con cartel que tuvo a Miguel Cotto, Eric Morel y Daniel Santos en el 2003.
Pero, sobre todo, ha sido el hogar de los actuales y máximos campeones del Baloncesto Superior Nacional, los Vaqueros de Bayamón, desde su inauguración en el 1988 cuando Rodríguez aún era jugador de la franquicia, ganando ese año su octavo cetro con esta franquicia.
“Para mí ha sido un honor en vida que ese coliseo lleve mi nombre y fue grandioso ahí en 1988 durante lo que fue mi temporada número 20, cuando todavía era buen jugador. Ese año también ganamos el campeonato, que fue el último y octavo de mi carrera para empatar con los ocho de ‘Tito’ Ortiz”, dijo Rubén Rodríguez.
Pero antes de esa gesta de Rodríguez en el recinto que lleva su nombre, los Vaqueros también jugaron en la cercana cancha José ‘Pepín’ Cestero, así como en otras canchas previas desde la década de los 1930′s cuando ganaron sus primeros dos títulos en 1933 y 1935 con Onofre Carballeira como su principal figura.
“En los años 30′s, cuando el BSN comenzaba, mucha de la metrópolis que hoy conocemos no existía. Bayamón, al igual que gran parte de San Juan, incluyendo Hato Rey, era puro campo y tenía muchos terrenos dedicados al ganado. En el caso de Bayamón, su principal auspiciador era la vaquería de este pueblo y de ahí surge su eventual nombre”, relató Rivera.
Inicialmente, el nombre de la franquicia fue ‘los Azules’ y hasta tuvieron un receso entre 1939 hasta 1953, pero adoptaron el nombre de ‘los Vaqueros’ a raíz del auspicio del 1955 bajo su auspiciador principal Espasas Dairy.
Ese prolongado receso explica un poco el por qué los Vaqueros no volverían a la gloria hasta 32 años después de su último campeonato en 1935 cuando en 1967 una tropa encabezada por ‘Tito’ Ortiz, Droz, Zamot, Toro y Billy Baum se alzó con el título y brindó los primeros destellos de la dinastía que se aproximaba con el entonces apoderado y futuro presidente federativo Hector M. “Hetín” Reyes al mando.
Para 1969, con los “Rubenes’ – Rodríguez y Montañez – como novatos, los Vaqueros lograron su segundo cetro de esa década previo a la ristra de cinco campeonatos en línea que se conseguirían entre 1971 a 1975, doblegando a los Santos de San Juan (1971), a los Piratas de Quebradillas (1972-73 y 1975) y a los Cardenales de Río Piedras (1974) durante ese transcurso.
“Básicamente, teníamos parte del equipo nacional en ese quinteto de Bayamón con Baum, Ortiz, Montañez, Zamot y yo. De ahí también salió Julio, que luego se convirtió en uno de nuestros mejores dirigentes, y más tarde vino Luis Brignoni. Teníamos un verdadero trabuco”, recordó Rodríguez, que también agregó otro título junto a Ortiz en 1981.
Para ese entonces ya se había dado un pase de batón en la gerencia vaquera con Pedro ‘Cuco’ Ortiz al timón y se reclutaron a jugadores como Mincy y Orlando ‘Pipo’ Marrero para el cetro de 1988 y, más tarde, a otros, como el veterano Georgie Torres y los bases Jimmy Ferrer y Michelo Dávila, para los campeonatos consecutivos de 1995 y 1996 bajo la tutela de Flor Meléndez.
Aunque Bayamón seguiría siendo contendiente con el desarrollo del centro Daniel Santiago y estarían en finales en 2001, 2002 y 2005, el anhelado campeonato número 14 no llegaría hasta 2009 cuando Rivera como apoderado montó un equipo con un núcleo de Christian Dalmau, Carmelo Lee, Orlando ‘Guayacán’ Santiago, Javier Mojica y al debutante Nathan Peavy bajo el comando de Toro para doblegar en siete reñidos juegos de serie final al equipazo que había montado Quebradillas con su fusión con los Criollos de Caguas. Bayamón volvería a la final en el 2010 pero cedieron ante los Capitanes de Arecibo en siete partidos y no optarían por el título número 15 hasta una década más tarde.
Poco antes de Yadier Molina asumir su rol como apoderado en el 2020, los Vaqueros habían efectuado varias transacciones que empezarían a dar frutos bajo su mando, tales como la firma de Nelson Colón como dirigente, los cambios para adquirir a Ángel Rodríguez, Ysmael Romero y Benito Santiago Jr., así como el fichaje de Mojica de regreso a las filas de Bayamón. Ese núcleo se alzó ese año con el campeonato número 15 en la afamada ‘burbuja’ del BSN a consecuencia de la pandemia de COVID-19.
Algunos críticos habían indicado que ese campeonato era ‘ilegítimo’, pero este grupo actual de los Vaqueros disipó esas dudas al irse 12-2 en la postemporada del 2022 y asegurar así su cetro número 16.
“Cuando dices 16 campeonatos suena fácil, pero hay que considerar que en la NBA solo dos de 30 franquicias tienen más campeonatos que nosotros (Celtics de Boston y Lakers de Los Ángeles con 17 cada uno). Y en la liga de España es similar (FC Barcelona tiene 16 y Real Madrid 14). Esto denota el compromiso que ha tenido el pueblo y diversas administraciones con este equipo a través de los años. Y todavía faltan muchos campeonatos más por ganar”, agregó Rivera.
Fuente: primerahora.com / 28 de noviembre de 2022