La percepción general entre jugadores boricuas es que el espigado relevista de los Tigres está listo para ese reto.
El boricua Joe Jiménez, relevista de los Tigres de Detroit, no se lo impone como objetivo, pero dos de sus compañeros lanzadores del equipo de Puerto Rico piensan que él tiene las herramientas para terminar como cerrador en las Grandes Ligas.
“Depende del trabajo que haga, pero si el cerrador está luciendo bien, no hay necesidad de cambiarlo”, dijo a El Nuevo Día Jiménez, quien el martes participó en su primer Juego de Estrellas y es producto de la escuela Puerto Rico Baseball Academy.
En Detroit, Jiménez tiene la encomienda de lanzar principalmente en la octava entrada, preparando el cierre para Shane Green.
En estos tiempos, muchos equipos suelen programar el uso de sus relevistas para sacar los últimos nueve outs, que suelen ser los más difíciles cuando la ventaja del equipo es estrecha. Es un hecho, además, que en ocasiones la parte más fuerte de una alineación se ve en la séptima u octava, y no necesariamente en la novena.
“Sí se da —que termino siendo cerrador— pues bien, pero lo importante es seguir trabajando”, agregó Jiménez, de 23 años.
El martes, el dirigente de la Liga Americana, A.J. Hinch, trajo a lanzar a Jiménez en la cuarta entrada frente a Brandon Crawford. Aunque lo llevó al conteo máximo de 3-2, terminó ponchándolo enfatizando en su slider.
Sus compañeros en el equipo de Puerto Rico, Edwin Díaz, cerrador de los Marineros de Seattle, y José Berríos, de los Mellizos de Minnesota, están convencidos de que Jiménez, si Detroit lo necesita ahora u otra novena más adelante, es candidato a closer.
“En un futuro lo veo compartiendo ese rol conmigo (en el equipo de Puerto Rico)”, afirmó Díaz, líder en juegos salvados en las Grandes Ligas, con 36, y ganador del Juego de Estrellas en el que la Liga Americana venció 8-6 a la Liga Nacional, en un auténtico festival de jonrones.
La velocidad de la recta de Jiménez ronda en las 97 millas por hora. Pero, el lanzamiento que le permite dominar es el slider. Su otro recurso es un cambio de velocidad.
En su segundo año en las Grandes Ligas, su primero completo, Jiménez tiene un récord de 4-1, con 2.72 de efectividad y tres salvados, en partidos en que ha sustituido a Greene.
Jiménez ha mantenido la ventaja de su equipo en 13 ocasiones y sus tres salvados los ha conseguido en seis oportunidades. En 43 entradas ha ponchado a 48.
Berríos afirmó que está convencido de que Jiménez tiene el perfil de cerrador. “Tira duro, y es agresivo con los bateadores, lo que es muy importante para ese rol”, dijo.
Editado.
Fuente: elnuevodia.com / 19 de julio de 2018