La Magia de Yadier Molina Tiene en la Cima a los Vaqueros del BSN

Los Vaqueros de Bayamón ostentan el mejor récord con 12-0, y son el único de los 12 equipos del Baloncesto Supeior Nacional (BSN) que sigue invicto.

En otras palabras, todo lo que Yadier toca en la isla en términos deportivos, comienza a ganar tarde o temprano. Los Vaqueros conquistaron en 2020 el campeonato del BSN en el primer año de Molina como apoderado. Con los Guardianes el receptor lleva cuatro años como dueño de franquicia y ha tenido campañas exitosas, aunque aún está buscando, cuando menos, su primer título seccional.

No obstante, no todo queda ahí. Molina es dueño de siete equipos de béisbol de pequeñas ligas entre las edades de 5-6 años hasta Sub-16. De los siete, los Guapos de Kuilan pasaron a los campeonatos estatales en cuatro distintas categorías luego de dominar en sus respectivas regiones.

Además, tiene equipos femeninos de voleibol en varias categorías en su pueblo de Dorado.

El compromiso que ha demostrado Molina con sus equipos en la isla a pesar de sus obligaciones como jugador de Grandes Ligas con San Luis, se hizo evidente el mes pasado cuando viajó para entregar personalmente a sus Vaqueros las sortijas de campeones tras declinar asistir al Juego de Estrellas en Colorado.

Pero los que atienden sus ‘negocios’ en la isla, pueden dar fe que ese compromiso y entrega de Yadier con sus equipos es tan serio, que su comunicación vía telefónica es diaria. Y a todos los atiende por igual.

Yadier posa para una foto junto a Ismael Romero, de los Vaqueros, luego de hacerle entrega de su sortija de campeón en el Coliseo Rubén Rodríguez de Bayamón.
Yadier posa para una foto junto a Ismael Romero, de los Vaqueros, luego de hacerle entrega de su sortija de campeón en el Coliseo Rubén Rodríguez de Bayamón.

“Se deja querer”

Lo contrario ocurrió con los Vaqueros del BSN, que tras una pausa forzosa del torneo por el COVID-19, reanudó su campaña en una burbuja en Río Grande y hasta allá fue Molina aprovechando que ya las Grandes Ligas había concluido su temporada.

“Es un tipo que se deja querer y se deja sentir. Y no está encima de la situación, sino que se hace parte de la situación. Y eso se respeta mucho”, dijo, por su lado, el dirigente de los Vaqueros, Nelson Colón. “Le da espacio a los jugadores y a nosotros (el cuerpo de entrenadores). Pregunta, quiere aprender tiene interés. Ese apodo de “El líder” es natural en él y eso lo transmite”.

Colón, quien guió a los Vaqueros al cetro en 2020 y este años los tiene invictos, recordó su experiencia con Molina en la burbuja del BSN el año pasado, ya que el receptor estuvo presente en todo aprovechando que el torneo acortado se celebró entre noviembre y diciembre, tiempo muerto para las Grandes Ligas.

“Entrenaba con los muchachos temprano, iba a ver vídeos (de los juegos previos) con nosotros, a las prácticas… se quedaba pasándole bolas, y no solo a Ángel (Rodríguez) y a (Javier) Mojica, sino al ‘second squad’ o “Bench Mafia” como él los bautizó. Almorzaba con nosotros, cenaba con nosotros, iba al juego, al ‘pregame’. Después por la noche íbamos al cuarto de él y vacilábamos, jugábamos dominó. Es un duro en dominó, aunque yo le di par de pelitas, pero es un duro”.

Aunque este año, naturalmente, no puede estar presente con los Vaqueros en el BSN pues está activo con los Cardinals, sus atenciones no han cambiado aunque esté a la distancia.

“Texteamos, hablamos… después de lo juegos y antes de los juegos. Está siempre pendiente a todo el mundo acá, llamando, preguntando qué necesitamos, qué hay que hacer, cómo te ayudo”, agregó Colón.

Molina fue escogido como sustituto de último momento para representar al equipo de la Liga Nacional en el Juego de Estrellas pero declinó la invitación. En vez, viajó a la isla para esos compromisos que ya tenía con sus equipos.

Editada.

Fuente: El Nuevo Día / 13 de agosto 2021