Yadiel Molina volvió a demostrar por qué es considerado como uno de los mejores receptores activos del mundo.
Ayer en la madrugada, fue el principal protagonista del equipo de Puerto Rico en la victoria 3-1 sobre Republica Dominicana, su verdugo en la final de la edición de 2013 del Clásico Mundial de Beisbol, en el inicio de la segunda ronda del Grupo F.
Con el madero, el veterano receptor lucio temible; con el guante fue todo un espectáculo. De sus manos salió el jonrón solitario que selló el triunfo; y de su mascota jugadas defensivas claves, como el out a Jean Segura en el plato tras un tiro de un solo bote del guardabosque Eddie Rosario en el primer inning, o el out a Nelson Cruz en un intento de robo de la intermedia para poner fin al octavo episodio.
Sin embargo, ponerse la capa de héroe no va con él.
“No importa lo que yo hice. El cuerpo lanzador hizo un gran trabajo. Todo el crédito para nuestro pitcheo. Ellos se lo merecen porque son los que pitchean y ejecutan”, expresó Molina en conferencia de prensa al finalizar el encuentro.
“Yo estudio el juego y tengo una idea de lo que voy a llamar, pero si ese pitcher no ejecuta, le van a dar su palo. Entonces, van a hablar mal del pitcher. Pero cuando hace bien, hablan bien de mí. Pero no, mentira, tienen que dale crédito a esos pitchers que hacen bien su trabajo con nosotros”, agregó el bayamonés de 34 años con una dosis de gran humildad.
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Fuente: El Vocero / 16 de marzo de 2017